Acto 4: ¡Fuego!

En la ciudad de Mariemburgo se esconden muchas más cosas de las que se ven a simple vista...

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igest
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Re: Acto 4: ¡Fuego!

Mensaje por igest »

El sonido de las botas del elfo se acerca aún un poco más a la puerta... de hecho, percibís, como la escasa luz que se filtra por la rendija inferior ha menguado, signo de que el elfo se encuentra cerca frente a ella. El sudor os recorre el cuerpo, vuestras plegarias se elevan y esperáis que todo pase...

- Cerveza aguada y queso rancio...

Adalbert insiste una vez más, con un tono de impaciencia en su voz... en ningún momento se percibe nerviosismo en su tono, casi os parece que realmente, está impaciente por cerrar su local e irse a descansar más que estar preocupándose por vuestra seguridad. O tiene don para la interpretación...

Un nuevo paso, la luz que se filtra por la rendija de la puerta vuelve a crecer, signo de que al menos el elfo se ha desviado. Otro paso más, varios, sonido metálico, un golpe fuerte... y de pronto el silencio. No escucháis nada procedente de fuera, permanecéis apenas respirando, pensando que los elfos se han marchado pero con la inquietud de si puede ser una treta, un intento de que salgáis... tampoco se escucha a Adalbert... Theo permanece completamente ajeno a lo que sucede fuera, Konrad apenas escucha lo que cree es una respiración...
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Nocturno
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Re: Acto 4: ¡Fuego!

Mensaje por Nocturno »

Theo Lobster

¡Ya se han ido esos estúpidos maniquíes! ¡JA! ¡Les hemos engañado!

Theo no parece muy consciente de que puede ser una trampa, así que grita entusiasmado antes de que Konrad pueda evitarlo. Antes de que se desespere se mueve hacia la puerta con intención de abrirla.
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SrSkaven
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Re: Acto 4: ¡Fuego!

Mensaje por SrSkaven »

Konrad Reder

Los gritos de su acompañante sobresaltan a Konrad, incapaz de contener a tiempo a Theo observa boquiabierto como se lanza sobre la puerta. Konrad se concentra en hacer desaparecer el temblor de su mano, presumía de ser un cirujano con buen pulso. Pero suele ser más fácil rajar a los muertos que a los vivos.
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igest
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Re: Acto 4: ¡Fuego!

Mensaje por igest »

¡Ya se han ido esos estúpidos maniquíes! ¡JA! ¡Les hemos engañado!

Konrad se ve sobresaltado por la impulsividad de Theo, que abre la puerta sin que pueda hacer otra cosa que encomedarse a la suerte...

Gira el pomo y de un empujón, la puerta se abre con facilidad dejando que la luz entre y cegándoles por un instante mientras sus ojos se adaptan a las nueva luz... "Sin duda, de estar los elfos esperándoles, seguro que ya les hubieran clavado una flecha[/b] piensa Konrad mientras observa a su alrededor la escena.

Theo ya se ha adelantado, y está cerca de Adalbert, que está en el suelo con los ojos cerrados... un fuerte golpe en la cara, y un ojo que empieza a hincharse dejan claro que uno de los elfos no le hicieron especial gracia las palabras del posdero. !!Los elfos!! No hay rastro aparente de ello, Konrad se acerca un momento a la puerta y tras escuchar desde la puerta, tiene bastante claro que no hay presencia cerca de los maniquies. No se escucha el tintineo de sus armaduras, ni se oyen pisadas cerca... puede que hayáis logrado darles esquinazo.

Al girarse, ve a Theo ayudando a Adalbert a incoporarse. Parece que, aunque trabajosamente, va recuperando la consciencia.

Esos pretenciosos... - escupe las palabras y lo que queda de saliva en su boca, mientras se toca el lugr donde ha recibido el golpe.

No se por qué os seguían, pero que Manann se los trage. De todas formas, no creo que quieran pasar el resto de la nocheen este agujero infecto... si esperáis un poco podréis regresar tranquilamente por donde habéis venido. Y si queréis pasar la noche aquí, el suelo no es tan frio como el barro de la calle, o una celda... Yo ahora tengo que irme a descansar.

Mientras dice esto, Adalbert se acerca a cerrar las contraventanas y tras apagar un par de velas que aún iluminaban la sala, coge otra. Si os váis cerrar la puerta al salir, si os quedáis, seguro que dormiréis más calientes con ella cerrada.... sea como sea, no quiero más sobresaltos esta noche. Y preferiría que dejéis la despensa tranquila... por lo demás, todos los que huyen de los maniquies son bienvenidos.

El hombre avanza pesadamente hacia la puerta que entendéis conduce a la zona "privada" y el lugar donde descansa. En vuestras manos está, pasar la noche bajo techo o reanudad la huida por las oscuras calles de este apartado barrio ...
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Nocturno
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Re: Acto 4: ¡Fuego!

Mensaje por Nocturno »

Theo Lobster

¡Vaya noche! ¿Verdad Konrad?

Había sido una noche movida; no sabían si habían conseguido su objetivo de sembrar caos entre los malditos elfos o si habían sido una gota en los dominios de Manaan, pero vaya si lo habían intentado. Creían que no habían conseguido desatar un incendio en los muelles, pero al menos habían llamado su atención y, quién sabe, tal vez la de la gente de Marienburgo.

Sin embargo parecía hora de parar. Hay 400 noches en un año y esta ya habían agitado bastante el avispero. Mejor descansar, recuperar fuerzas y comprobar el alcance de sus actos esa noche que correr en la oscuridad cuando seguramente les estaban buscando.

Compañero, yo me quedo a dormir-- Aseguró a Konrad.

Y seguidamente hizo una bola con parte de su ropa para descansar la cabeza sobre algo blando y se tiró a recuperar fuerzas en lo poco que quedaba de noche.
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SrSkaven
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Re: Acto 4: ¡Fuego!

Mensaje por SrSkaven »

Konrad Reder

Konrad observó como su compañero se acomodaba entre sus ropajes para viajar unas horas al reino de Morr. Konrad añoraba el calor y la comodidad de su catre pero dada su situación parecía que quedarse era la mejor de las ideas. Konrad se aseguró de dejar la puerta bien cerrada antes de buscar alguna lona que pudiera servirle de manta.

Se sentó en el suelo con la cabeza apoyada en la carcomida pared de madera y con la mano siempre cerca de su daga esperó a que el cansancio y el sueño le venciesen.
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