Mannricht I: Hezer, el demonio

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Saratai
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Mannricht I: Hezer, el demonio

Mensaje por Saratai »

La neblina y la lluvia dan forma a un microclima mas propio de un lugar cercano al mar que de una ciudad cercana a las montañas. Sin embargo, Averheim suda por todos sus poros tras 3 días de intensa lluvia.

Los talabeclandeses son un pueblo fuerte y adaptable. Durante años e incluso siglos, han sobrevivido a todo lo que el viejomundo les ha hechado encima. Han sido leales a sus dioses y a su patria, no sin riñas con otras provincias, sin embargo ayudando siempre que el imperio lo ha necesitado pues los hijos de Krugar, los taleuten, pueden tener fama de incultos bárbaros y algo malintencionados pero tienen bastante honor en comparación a otros pueblos imperiales y son duros como los robles que abundan en sus tierras.

Hans y Johann salieron de la taberna al comenzar la tarde, salpicando de barro la calle con sus botas remojadas en la llovizna. Para cuando Johann se percato de la ausencia de su compañero, éste se encontraba en un puesto del mercado que no tardaria en desaparecer al ocultarse el sol. En el estaba adquiriendo una botella de licor y ojeando otros productos tan caros como innecesarios, sin ser menos feliz por ello...




FDI:El tema ya esta abierto
Última edición por Saratai el 04 Mar 2009, 10:48, editado 5 veces en total.
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Atrus
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Johann Burss

Johann se acerca a Hans observando, curioso, la botella recien adquirida. -¿Cuanto cuesta eso? - Le pregunta al grandullón, al tiempo que introduce la mano en sus bolsillos buscando algunos chelines. "Aun tengo mi pequeña botella de licor, pero si es barata me vendrá bien aumentar mis reservas..." piensa. De joven Johann detestaba el alcohol, por considerarlo algo poco natural. Él siempre optaba por las cosas que la madre naturaleza le ofrecía, como buen seguidor de Taal y Rya, sin embargo los años pasados en aquella posada como guardían le habían enseñado a apreciar los licores, vinos y cerbezas, y ahora era un vicio que le encantaba, aunque su bolsillo no opinara lo mismo.

- Quizá yo también compre algo antes de que cierren. - Añade al tiempo que mira lo que el comerciante le puede ofrecer.
El miedo es el peor enemigo de la mente.
Saratai
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Mensaje por Saratai »

El comerciante os regala una sonrisa felina y de poco valor.
-Entre mi haber te ofrezco lo poco que me han dejado los compradores de la mañana, un maravilloso justillo de cuero tachonado y ribeteado, confortable a la par que resistente y fiable.
Si no te interesa puedes adquirir una preciosa cota de mallas en telas rojas y verdes
Te enseña una cota de malla muy bonita, que parece bastante comoda, son el emblema de Hochland, con el emblema de un ciervo y un arco en una de las hombreras
Su manufactura es esquista, pero desgraciademente (para la mayoria) su precio tambien. Si no dispones de tanto dinero tambien puedes conseguir estas grebas y este bonito gorro de cuero, te los dejo en oferta por 25 co comenta con alegria
Sin dejarte hablar, e interrumpiendote constantemente te ofrece un escudo con el emblema de un león en un fondo cuadrado de color azul, siendo el escudo de forma circular con reborde, pidiendote 12 co por el. Tambien enseña un gran martillo de hierro negro como la noche, que le ofrece a Hans
Pero no solo de guerra vive el hombre, por ello tengo en mi cada vez mas pequeño haber (por culpa de mis precios tan baratos y asequibles) articulos como una botella del mejor vino bretoniano por tan solo 2 chelines y licor de Wissenland a un chelin, lo mejor que ha salido este año. Pero si eres un buen ciudadano imperial sin duda compraras este pequeño barril de cerveza negra de Middenland por tan solo dos miseros chelines, una ganga que no te haria de no ser porque mi ayudante se ha ido y no puedo transportar tanto material.
Tengo ademas unos dados de madera tallados que solo te daran unos cada 15 tiradas, por 10 chelines y un rico perfume por 18 chelines, propio de los mismos marienburgueses.

-Para terminar tengo una cura de Melchin, una panacea pues curara todas tus afecciones por tan solo 29 despreciables chelines. Por si te interesa, mi esposa puede ofrecerte tambien ropas, ella esta 3 puestos a la derecha Termina de decir el mercader, esperando ansioso tu respuesta
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Atrus
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Mensaje por Atrus »

Johann Burss

"Ahh, mercaderes, esa curiosa fauna que brota en todas partes del imperio. Donde quiera que vayas intentarán sacarte algun chelin" Piensa Johann mientras escucha las palabras del comerciante y observa lo que le ofrece. "Lo peor es que lo consiguen. Siempre hay algo que queremos o necesitamos..."

Johann había sacado unos chelines de su bolsillo para abrir el apetito del comerciante. - Mmm me llevaré una botella de ese licor, también quiero esos magníficos dados ¿Puedo probarlos? Y esa cura... ¿como de fiable es? - Dice Johan mientras toquetea un poco las pertenencias del hombre, algo que siempre les pone nerviosos. - Te doy 35 chelines por todo. ¿Que me dices? - Le pregunta rápidamente mientras se rasca la barba y sostiene la mirada del mercader, que no es capaz de aguantarla por mucho tiempo, pues el rostro de Johann no es precisamente agradable de ver.
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Mensaje por Saratai »

-Mmmm, te hare una rebaja ya que se esta haciendo tarde y tengo prisa, te dejare los dados y la cura por 40 chelines todo
Mientras el mercader te da el nuevo precio de ultima hora, el gigante de Hans ya le ha desembolsado una de las piedras que tenia en su bolsa. Es inexplicable como un hombre como él puede tener una piedra tan preciosa como la que el rápido mercader ha aceptado. La pequeña piedra es de un brillante color verde, con motas oscuras formando vetas que la dotan aun de más belleza. A cambio de ella le da a Hans un impresionante martillo de guerra, de un metro ochenta de altura, todo de hierro rematado en cobre con el símbolo de sigmar moldeado en el final de la cabeza y ribeteado con pequeñas calaveras en la empuñadura, recubierta ésta de telas rojas.
-Con este martillo y una buena armadura que pienso adquirir en cuanto acabe la mision podre salir por fin del imperio y ver mundo, amigo mio Resuena en el puesto del astuto mercader la voz del talabeclandes
Mientras, el mercader te dice -No entiendo como puedes regatearme productos tan valiosos estando en compañia de tan generoso señor. Dame los 40 chelines que vale la mercancía o no habra trato, miliciano



FDI:Si quieres rebajar el precio aun mas necesitaras una tirada enfrentada en regatear
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Atrus
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Mensaje por Atrus »

Johann Burss

Johann mira al enorme Hans y a su nuevo y amenazador martillo "Mi querido compañero Talabeclandés parece que tiene mucho dinero..." piensa. Después observa al mercader. - Muy bien, sin trato pues. - Dice dandose la espalda. - Seguro que encuentro algún sitio más barato. ¿Vamos Hans?

(Con este gesto hago la tirada de Regatear. Si la fallo me marcho de allí sin comprar nada, con mi botella de licor que ya poseo y mi triste hacha, pero conservando mis chelines xD)
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Mensaje por Saratai »

Hans Efferhöld

-Deacuerdo amigo, vamonos
Hans no parece haber entendido la indirecta, pues comienza a andar alejandose del puesto. El mercader parece confundido, pero comenta:
-No puedo rebajar los precios aun mas, esta mercancia no es robada y me ha costado dinero. De todas maneras, si cambias de parecer me dirijo a Streissen... Acabando la frase comienza a recoger, y en contra de lo dicho anteriormente, sí tiene ayudantes que le recogen los bártulos. Propio de un mercader mentir constantemente.

El camino hacia la casa de Hezer es más largo de lo que incluso habia dicho Alan, y la lluvia no mejora la situación. Si Hans fuera más gordo tal vez valdria para tapar las gotas de la fría agua helada que os dispara el firmamento, pero desgraciadamente no es asi.

Serian las ocho de la tarde cuando por fin salis de la ciudad y os dirigis a las afueras donde los granjeros se encuentran, sorprendiendoos el hecho de que tienen patrullas formadas en los caminos, un trabajo que a ellos no les corresponde. Tambien es curioso ver a un sacerdote de Sigmar entre esta gente, llamando mucho la atencion con sus atuendos entre la multitud de harapos malolientes. Este sacerdote parece que esta preguntandole algo a una familia en la puerta de su chabola. Una vez llegados a este punto, y con unas 50 casas en la zona, no teneis ni idea de donde puede estar el ''hogar'' que buscais...


FDI:En la tirada de regatear salio un 78.(a ver cuando nos llega el progama para las tiradas XD )
Dieter, puedes postear ya
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dieter_gayer
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Mensaje por dieter_gayer »

Dieter Gayer

La lluvia acompaña mis pasos como el llanto de los dioses.
Mis camaradas... ¡Malditos sean esos asesinos!
Entonces veo a dos hombres que se acercan los cuales se asemejan a la descripción que me dieron.
- Saludos. Soy Dieter Gayer, patrulla de caminos. ¿Por casualidad no seréis los hombres que envió el mayor Alan a investigar la desaparición de esos críos?
¡Con la comida de Dieter no se juega!
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Mensaje por Saratai »

Hans Efferhöld

Hans mira sorprendido a Johann, buscando en él una respuesta. Es tarde y los pobres campesinos vuelven a sus hogares para reposar y volver a trabajar al día siguiente. En la calle solo quedais vosotros tres.
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Atrus
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Mensaje por Atrus »

Johann Burss

Johann se disponia a conversar con su callado compañero Talabeclandes (ardía en deseos de tener noticias de su tierra natal) cuando vio al hombre que se aproximaba sin quitarles ojo de encima.

- Saludos. Soy Dieter Gayer, patrulla de caminos. ¿Por casualidad no seréis los hombres que envió el mayor Alan a investigar la desaparición de esos críos? - Dice. Hans y Johann se miran mutuamente. Sus cabellos y sus ropas estaban empapados por la lluvia. Los dos recios milicianos oriundos de Talabecland estaban acostumbrados a la intemperie, pero Johann se preocupó por el patrullero que se les acababa de presentar.

- Así es, somos nosotros. No sabía que hubiera gente al corriente de nuestra misión... será mejor que nos refugiemos en alguna parte. - Dice mirando a las casas que los rodeaban como buscando algo que le llamara la atencion, quizás un templo o una taberna... - Podremos hablar mejor en un sitio que nos resguarde del frio. ¿Conoces alguno?
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Mensaje por dieter_gayer »

Dieter Gayer

- Pues la verdad es que no conozco ninguno, pero siempre podemos buscarlo. Una buena pinta nos vendrá muy bien. - digo sonriendo cortésmente.
Entonces comenzamos a buscar, bajo la lluvia, un local cerca para poder descansar mientras hablamos.
El hombre que ahora os acompaña tendrá unos 29 años, y mide aproximadamente 1,77. Sus ojos marrones apenas se dejan ver bajo su sombrero de ala ancha, al igual que su pelo, corto y de un tono rubio ceniciento que solo podéis adivinar al ver su bigote y patillas terminadas en una perilla muy bien cuidados.

FDI: Me he esperado a narrar por si acaso no encontrásemos ninguna taberna, para no adelantar acontecimientos.
¡Con la comida de Dieter no se juega!
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Realmente en una zona como esa no hay ninguna taberna, pues los campesinos no tienen mucho dinero donde gastar y los viajeros prefieren andar un trecho para llegar al centro de Averheim. Mientras hablais el sol termina de morir y una noche cerrada amenaza sobre vuestras cabezas. Hans se presenta al hombre llamado Dieter, estrechando su enorme mano con la del patrullero.
Parece que habra que confiar en la famosa hospitalidad averlandesa, piensa Hans. En vuestro campo de visión aparecen 3 casujas, la primera rematada con una carreta en la puerta, la segunda con un burro y una mecedora en el portal y la tercera apunto de venirse abajo. Podeis buscar mas casas, pero requeriria pasar mas tiempo bajo la lluvia, idea que incomoda al leñador.
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Mensaje por dieter_gayer »

Dieter Gayer

Devuelvo el saludo al fornido hombre y comenzamos a andar y, cuando habíamos perdido toda esperanza de encontrar un buen lugar donde resguardarnos, vemos las tres casas.
- Bueno, llamaré a la puerta de la casucha donde están el burro y la mecedora, - me parece más hospitalario. - si no, probemos en la de la carreta, si os parece bien.
Toco a la puerta y, si reponden le diré a la persona al otro lado:
- Buenas noches. No quisiéramos molestar pero si fuese posible que nos dejasen pasar la noche mientras arrecia la lluvia, le estaríamos muy agradecidos.
¡Con la comida de Dieter no se juega!
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Campesina

-Se puehe' sabe qui hacen mozos de vue'so talle a etha hora sin el trabaho merecio?!

Sin duda, el idioma del campesinado averlandés ha dado al imperio más de una comedia, sugiriendo por su habla que son descendientes de cabras y cosas aún peores. No es que sean mala gente, pero su cultura deja mucho que desear, y sera dificil entender lo que dicen.
Gracias a tu conocimiento de estas tierras comprendes que lo que la mujer dice es que es raro encontrar hombres en el campo sin trabajar llamando a puertas ajenas. Antes de que podais decir nada os abre la puerta y veis a un viejo hombre sentado en una silla junto a un sucedaneo de chimenea. Tres niños juegan en el suelo con una rata, cogiendola por la cola y azuzandola con palos, llegando a morderla a veces. La escena es encantadora a su rural modo, pero vosotros estais más acostumbrados a esto que vuestros compañeros de ciudad.
El hombre al veros entrar pregunta:
-Quie' so utedes y que desean de nustra jumilde morada?. Quiehen llegase algo a la buca'?
Esta vez os cuesta más entender al viejo desdentado que os señala unos trozos de carne de no muy fiable calidad en una mesa ridicula cuyas patas están hechas de trozos mal tallados y aspero tacto. Sin embargo esta gente se muestra amable, a pesar de no conoceros mas que dos minutos.

FDI:Tiradas conjuntas de hablar idioma(reikspiel) consiguen que entendais a duras penas lo que los campesinos dicen. Ahora estais en su casa como invitados, pero esta gente puede tanto daros cobijo durante semanas como clavaros en una estaca, dependiendo de como hableis y de que pregunteis. Sed cuidadosos con las palabras que elegís.
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dieter_gayer
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Mensaje por dieter_gayer »

Dieter Gayer

Tardo unos momentos en comprender al matrimonio, pero en mi infancia estuve en contacto más de una vez con pueblerinos con acentos ininteligibles, así que puedo apañarme.
- Muchas gracias, nobles señores. Mi nombre es Dieter Gayer, de Ostland y estos caballeros son Hans Efferhöld y Johann Burss.
Les agradecemos mucho su hospitalidad.


Aprovecho para echar un vistazo a mi alrededor, por si veo algo de relevancia, sospechoso... cualquier cosa.
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Cerrado

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