Una cosa sobre la creación de un nuevo juego en una ambientación que te gusta: es que algunas veces es difícil ser paciente! Siempre estoy buscando profundizar más en los detalles de la ambientación, de las nuevas mecánicas, y de todo el estupendo material que encontrarás dentro del juego de rol de Deathwatch. En las semanas que están por llegar yo (y los demás miembros del equipo de diseño "Proyecto Iceberg") tendré mucho que decir sobre cosas como Renombre, Historias de Poderosas Armaduras, Misiones, El fuerte de Vigilancia Erioch, la Bóveda Omega, y mucho, mucho más.
La Cruzada en la Extensión Jericho reúne tropas de todas las partes de la galaxia, y ninguna Cruzada podría estar completa sin los Marines Espaciales del Capítulo de los Templarios Negros. Un capítulo sucesor de los Puños Imperiales, los Templarios Negros tienen un largo y glorioso registro de enfrentamientos con los enemigos del Hombre en feroces asaltos. Estos solemnes y celosos Hermanos de Batalla traen fe y furia a los Vigilantes de la Muerte, y el autor Andy Hoare nos cuenta un poco más sobre ellos a continuación:
Los Templarios Negros
“Para la oscuridad, traeré fuego. Para los ignorantes, traeré fe. Aquellos que reciban estas ofrendas vivirán, ,pero la muerte y la condenación eterna visitarán a aquellos que los rechacen.”
– Capellan Grimaldus
Después de la Gran Herejía, Rogal Dorn, Primarca de los Puños Imperiales, se resistía a la división de las Legiones en capítulos más pequeños. Solo fue cuando los Puños Imperiales fueron declarados herejes cuando Dorn desistió, permitiendo que sus queridas Legiones fuesen divididas en Capítulos. Uno de los nuevos Capítulos nacidos en ese momento fue el de los Templarios Negros.
Para probar su lealtad al Emperador, el primer Señor del Capítulo de los Templarios Negros - el alto Mariscal Sigismund- reunió una gran flota de guerra e inició la mayor Cruzada de los Marines Espaciales en la historia del Imperio. Está duro 10.000 años.
Evitando el establecimiento de un mundo hogar, los Templarios Negros se dirigieron a las estrellas en una poderosa flota de guerra. En lugar de construir un único monasterio-fortaleza de Capítulo como hacen la mayoría de los Capítulos de los Marines Espaciales, los Templarios Negros decidieron establecer un fuerte del capítulo en cada mundo que conquistaban, para vigilar posibles traiciones, para servir de base a futuras Cruzadas, y para reclutar nuevos hermanos de batalla.
La Cruzada de diez milenios de duración de los Templarios Negros ha visto como sus guerreros se veían envueltos en algunos de los conflictos más trascendentales. Los Grandes Mariscales siguieron el ejemplo de su fundador y llevaron la lucha a los reinos de los alienígenas, los herejes y la brujería. Los Templarios Negros son cruzados, guerreros sagrados luchando para traer la verdad y la luz del Emperador a los mundos sin conquistar de la galaxia. Con sus escudos y espadas sierra, los Templarios Negros convierten a los ignorantes a la luz del Señor de la Humanidad y destruyen a aquellos que se niegan a acoger su verdad. Cada cruzado está dirigido por la voluntad del Mariscal al mando, y cada uno es enviado por el decreto del Gran Mariscal de los Templarios Negros para cumplir su misión principal de purificar las estrellas.
Cuando no se encuentran envueltos en una batalla, la gran mayoría de hermanos Templarios Negros se pueden encontrar invariablemente preparándose para ello. Pasan su tiempo orando y meditando, o envueltos en rituales de entrenamiento para perfeccionarse. Los Iniciados confiados con el entrenamiento de un Neófito pasan largas horas transmitiendo su conocimiento a sus jóvenes pupilos y supervisando ejercicios interminables, sesiones de práctica, y pruebas. Los hermanos con frecuencia se imponen a si mismos difíciles penitencias, renunciando a todo excepto a las necesidades básicas para purificarse a los ojos del Emperador y de su Primarca, y para seguir el ejemplo de su fundador Sigismund.
Cuando sirven junto a otros Hermanos de Batalla de los otros Capítulos de Marines Espaciales, muchos Templarios Negros se preparan a si mismos con largos ayunos y vigilias de una semana de duración para tolerar la presencia de los bibliotecarios Marines Espaciales. Para aquellos que sirven en los Vigilantes de la Muerte, luchando junto a otros Marines Espaciales que utilizan poderes psíquicos es una dura prueba, una prueba que deben superar para servir al Emperador de forma más plena y para anular a los odiados alienígenas. Por esta razón, se tiene mucho cuidado cuando se selecciona a un Templario Negro para formar parte de los Vigilantes de la Muerte,, ya que solo un hermano capaz de contener su intolerancia profundamente arraigada será capaz de luchar con toda su capacidad. A pesar de eso, incluso estos individuos es probable que pasen cada hora que no gastan luchando en profunda contemplación y oración, a menudo enclaustrandose lejos de sus compañeros marines espaciales de los Vigilantes del Emperador en un santuario privado al Emperador, Dorn y Sigismund.
Adelante, Hermanos de Batalla!
Seguid atentos a la próxima entrega donde exploraremos el quinto capítulo de Marines Espaciales para Deathwatch!
Puedes leer el texto original (en ingles) aquí.
